domingo, septiembre 24, 2006
Conjura y Liberación
"Todo se ensambla fielmente, lo vivido y lo soñado, todo se descubre comúnmente compartido en el universo de una misma locura: y si nos atrevemos a mirarlo a la cara, horrores, maravillas, sueños, mentiras, todo es conjura y liberación." Pauline Réage - Histoire d'O
sábado, septiembre 23, 2006
No quiero pensar...
Necesito pensar, me gusto el sabor de tus besos pero cerré mis ojos y no imaginé que eras tú…
Tras cenar fuimos a una Jaima, nos recostamos en el suelo, descalzos, tu te apoyabas en la pared, sobre unos cojines. Te mostrabas tan feliz de haberme reencontrado…
Y me atrajiste hacía ti, entallaste mi cintura y me besaste en los labios.
No rechacé tu beso, pero me sentí extraña.
De nuevo me besaste y te correspondí. Eras tú, sentí que volvía a un rincón perdido de mis recuerdos y estaba de nuevo con aquel hombre que un lejano día llegue a amar.
Pero en mi imaginación no fuiste tú quien me besaba…
Ilusionado me hablabas de viajes, me contabas los lugares y locales que has visitado en Londres y que deseas mostrarme, también has estado varías veces en Cap d’Adgê y deseas que te acompañe, quizás el próximo verano.
Me comentaste varias tiendas de tu ciudad donde deseas llevarme cuando yo vaya para que me convierta en modelo para ti, probándome ropa fetish.
Ayer te pedí tiempo, me sentí reconfortada con tu presencia, me infundes tranquilidad, serenidad y confianza pero no puedo imaginar dar un paso más allá de una amistad.
Hoy un imprevisto familiar te ha obligado a marcharte anticipadamente, no ha sido nada grave y he respirado un poco aliviada por conseguir algo más de tiempo para pensar…
Ayer ante mí estabas tú: la realidad, los recuerdos y en mi mente la fantasía.
Y no sé si tengo elección, mi razón me dicta que debería de renunciar a lo que mi alma reclama, tú eres la realidad, puedes darme una relación donde encuentre estabilidad emocional, donde exista confianza, complicidad, tú puedes darme las cosas que siempre soñé, pero mis fantasías siguen rondando mi mente y en mi imaginación. Y en esta sinrazón Él vuelve una y otra vez envuelto en brumas de irrealidad.
Y sé que llegara ese momento donde habré de elegir seguir por el camino de la locura o el de la cordura, pero ahora prefiero no tener que pensar, no quiero pensar…
Tras cenar fuimos a una Jaima, nos recostamos en el suelo, descalzos, tu te apoyabas en la pared, sobre unos cojines. Te mostrabas tan feliz de haberme reencontrado…
Y me atrajiste hacía ti, entallaste mi cintura y me besaste en los labios.
No rechacé tu beso, pero me sentí extraña.
De nuevo me besaste y te correspondí. Eras tú, sentí que volvía a un rincón perdido de mis recuerdos y estaba de nuevo con aquel hombre que un lejano día llegue a amar.
Pero en mi imaginación no fuiste tú quien me besaba…
Ilusionado me hablabas de viajes, me contabas los lugares y locales que has visitado en Londres y que deseas mostrarme, también has estado varías veces en Cap d’Adgê y deseas que te acompañe, quizás el próximo verano.
Me comentaste varias tiendas de tu ciudad donde deseas llevarme cuando yo vaya para que me convierta en modelo para ti, probándome ropa fetish.
Ayer te pedí tiempo, me sentí reconfortada con tu presencia, me infundes tranquilidad, serenidad y confianza pero no puedo imaginar dar un paso más allá de una amistad.
Hoy un imprevisto familiar te ha obligado a marcharte anticipadamente, no ha sido nada grave y he respirado un poco aliviada por conseguir algo más de tiempo para pensar…
Ayer ante mí estabas tú: la realidad, los recuerdos y en mi mente la fantasía.
Y no sé si tengo elección, mi razón me dicta que debería de renunciar a lo que mi alma reclama, tú eres la realidad, puedes darme una relación donde encuentre estabilidad emocional, donde exista confianza, complicidad, tú puedes darme las cosas que siempre soñé, pero mis fantasías siguen rondando mi mente y en mi imaginación. Y en esta sinrazón Él vuelve una y otra vez envuelto en brumas de irrealidad.
Y sé que llegara ese momento donde habré de elegir seguir por el camino de la locura o el de la cordura, pero ahora prefiero no tener que pensar, no quiero pensar…
viernes, septiembre 22, 2006
mi Tributo a Tí...
Perturbas mis sueños, mi cuerpo ansía tu cuerpo y mi alma enloquece por sentir tu alma cerca…
Te deseo mi Amo, quisiera llorar de felicidad por saberme tuya, quisiera que pudieras ver mis lágrimas de alegría por haberte encontrado.
Tú eres mi Señor, el único, el Amo que siempre soñé y jamás pude imaginar que existiera, el Dueño infinito de mi cuerpo y alma, ahora ya no existe el tiempo, ni existe ya lugar ni distancia que me separé de Ti…
Fantasia y realidad se han fundido en mi corazón...
Estos días te añoraré como nunca, te desearé como nunca y tan sólo esperaré que el vagar de mi alma entre las Brumas pueda encontrarte cada vez que te piense…
Todo mi mundo te pertenece, y también en este mundo de la mujer estás presente, este es desde aquí mi tributo para estos días de ausencia mi querido Dueño,porque no solo la esclava te añorara, necesitaba gritarte que la mujer te pensará, te añorará, te deseará...Y se sentirá dichosa de saberse en la mente de su Amo, Dueño y Señor…
Te deseo mi Amo, quisiera llorar de felicidad por saberme tuya, quisiera que pudieras ver mis lágrimas de alegría por haberte encontrado.
Tú eres mi Señor, el único, el Amo que siempre soñé y jamás pude imaginar que existiera, el Dueño infinito de mi cuerpo y alma, ahora ya no existe el tiempo, ni existe ya lugar ni distancia que me separé de Ti…
Fantasia y realidad se han fundido en mi corazón...
Estos días te añoraré como nunca, te desearé como nunca y tan sólo esperaré que el vagar de mi alma entre las Brumas pueda encontrarte cada vez que te piense…
Todo mi mundo te pertenece, y también en este mundo de la mujer estás presente, este es desde aquí mi tributo para estos días de ausencia mi querido Dueño,porque no solo la esclava te añorara, necesitaba gritarte que la mujer te pensará, te añorará, te deseará...Y se sentirá dichosa de saberse en la mente de su Amo, Dueño y Señor…
jueves, septiembre 21, 2006
¿Quieres ser mi sumisa?
Te miré sorprendida, habían pasado apenas unas horas desde que nos habíamos encontrado en aquel tren y tú rompiste el silencio que empezaba a abrumarnos en aquella calida terraza una tarde cualquiera de invierno.
Ya nos habíamos contado casi todo y tan sólo quedaba abordar el motivo de tu viaje para conocerme.
Y fue entonces cuando supe que los mails previos, las veladas en el chat y las interminables conversaciones por teléfono habían fructificado en un mutuo deseo de iniciar una relación…
Y tras aquel fin de semana llegaron otros días compartidos y muchos momentos felices.
Fui tu primera sumisa y aquellos cinco meses me colmaste de felicidad con tus atenciones, tus detalles y tu trato…Convirtiéndote en mi Amo.
¿Sabes que he seguido usando durante estos casi cinco años la pulsera que me regalaste en mi cumpleaños?
Acero y oro como una serpiente enroscada a mi muñeca.
Jamás pensé que la vida pudiera hacernos reencontrar en un momento similar.
Y dices que quizás es ahora nuestro momento porque entonces no pudo serlo.
Vuelves a ser el hombre entusiasta y feliz que un día conocí, te muestras tan ilusionado con nuestro encuentro…Y yo temo por tu ilusión por si vuelves a agobiarte como entonces por no tenerme y necesitarme...
Me has contado que escribiste sobre aquella nuestra primera noche compartida en un parador a la orilla del mar, y te he confesado que yo también escribí un relato sobre aquella noche tan especial.
No sabes que en realidad escribí muchas más páginas donde eras tú el protagonista, rememorando nuestros dulces y excitantes encuentros.
Quieres que intercambiemos nuestros escritos y me perturba la idea de sentirme de nuevo desnuda frente a ti. Desnudarte mis recuerdos, mis pensamientos otra vez…
En aquellos días en que me seducías tan sólo con tu mirada, con tu olor…Eras irresistible para mí y cada vez que estábamos juntos volvías a vencer a la mujer y a apoderarte de la sumisa.
He adorado tu recuerdo, siempre fuiste alguien muy especial para mí, y ahora por sorpresa vuelves a mi vida, cuando más necesitada de entregarme estoy.
Mañana volveré a verte, luciré mi pulsera en la muñeca, como siempre,desde entonces...
No sé si tu recordaras al verme lo que un día fui para ti y si se removerán en nosotros de nuevo deseos escondidos, mañana estarás aquí, comeremos juntos y verás de nuevo a quien un día fue…Tu sumisa…
Ya nos habíamos contado casi todo y tan sólo quedaba abordar el motivo de tu viaje para conocerme.
Y fue entonces cuando supe que los mails previos, las veladas en el chat y las interminables conversaciones por teléfono habían fructificado en un mutuo deseo de iniciar una relación…
Y tras aquel fin de semana llegaron otros días compartidos y muchos momentos felices.
Fui tu primera sumisa y aquellos cinco meses me colmaste de felicidad con tus atenciones, tus detalles y tu trato…Convirtiéndote en mi Amo.
¿Sabes que he seguido usando durante estos casi cinco años la pulsera que me regalaste en mi cumpleaños?
Acero y oro como una serpiente enroscada a mi muñeca.
Jamás pensé que la vida pudiera hacernos reencontrar en un momento similar.
Y dices que quizás es ahora nuestro momento porque entonces no pudo serlo.
Vuelves a ser el hombre entusiasta y feliz que un día conocí, te muestras tan ilusionado con nuestro encuentro…Y yo temo por tu ilusión por si vuelves a agobiarte como entonces por no tenerme y necesitarme...
Me has contado que escribiste sobre aquella nuestra primera noche compartida en un parador a la orilla del mar, y te he confesado que yo también escribí un relato sobre aquella noche tan especial.
No sabes que en realidad escribí muchas más páginas donde eras tú el protagonista, rememorando nuestros dulces y excitantes encuentros.
Quieres que intercambiemos nuestros escritos y me perturba la idea de sentirme de nuevo desnuda frente a ti. Desnudarte mis recuerdos, mis pensamientos otra vez…
En aquellos días en que me seducías tan sólo con tu mirada, con tu olor…Eras irresistible para mí y cada vez que estábamos juntos volvías a vencer a la mujer y a apoderarte de la sumisa.
He adorado tu recuerdo, siempre fuiste alguien muy especial para mí, y ahora por sorpresa vuelves a mi vida, cuando más necesitada de entregarme estoy.
Mañana volveré a verte, luciré mi pulsera en la muñeca, como siempre,desde entonces...
No sé si tu recordaras al verme lo que un día fui para ti y si se removerán en nosotros de nuevo deseos escondidos, mañana estarás aquí, comeremos juntos y verás de nuevo a quien un día fue…Tu sumisa…
martes, septiembre 19, 2006
Un paseo pendiente...
Han pasado ya cinco años desde que fuiste mi Amo.
Recuerdo la primera cita, en un tren, el beso al despedirnos y el final de la tregua que nos habíamos marcado aquel primer día.
También recuerdo con dulzura nuestros encuentros.
Hoy me has recordado aquella primera noche en la que tuve que salir desnuda desde el baño hasta la penumbra de la habitación donde me esperabas sentado en un sillón.
Como me examinaste para después, mientras me tumbaba sobre tu regazo azotarme el trasero.
Me sentía extraña en aquella nueva situación para mí, mientras me hacías aflorar todas aquellas sensaciones mezcladas de vergüenza y deseo.
Te gustaba atarme, vendabas mis ojos con pañuelos de seda.
Jugábamos en cualquier parte, llegaste a atarme en una mesa de la habitación del hotel en una ocasión.
Cinco años ya…Y aún recuerdo tu olor y tu sonrisa.
Este año pasado coincidimos en varias fiestas, pero no me atreví a saludarte y aunque una vez cruzamos nuestras miradas no me reconociste.
Ahora mi melena es lisa y rubia, tú me conociste pelirroja, con el pelo corto, algo ondulado, y entonces estaba más delgada.
Me he acordado de ti estos días y hoy te he enviado un mail.
Hemos hablado de nuevo hace unos momentos.
Estuviste mirando unas viejas fotos mías hace unos días, casualidad que también hayas pensado en mí ahora, ambos nos hemos sorprendido de habernos pensado…Justo ahora.Tú creías que me había apartado de esto y que había vuelto con mi ex marido, te has sorprendido gratamente de que siga aquí. Has roto una relación hace un mes de tres años, desgastada ya por multiples peleas. Paralela tu trayectoria a la mía.
Estamos libres los dos, ambos sabemos lo que deseamos vivir, la experiencia de estos años queremos compartirla y quizás volver a probar juntos a ser Amo y sumisa.
Parece que este es nuestro momento y lo que entonces no pudo ser, quizás ahora vuelva sea posible.
Te he notado feliz de reencontrarme, tu voz delataba tu alegría, me has contado que últimamente te sentías desangelado y que no podías creer que yo hubiese vuelto a aparecer. Que buscaste mi teléfono pero yo lo cambié hace años, también cambié aquel mail al que me escribías, menos mal que tú conservaste el mismo…
Y me has afirmado que vendrás este fin de semana si deseo verte. Siempre me gusto tu impulsividad y tu sinceridad. Me has preguntado si estaría dispuesta a ir conociéndonos poco a poco, sin agobiarnos y probar.
Me has contado que estas terminando una novela, quieres que de nuevo sea tu primera lectora, te he contado que yo ahora también escribo y quieres leer mis cosas.
Llegarás el viernes…Han pasado cinco años y sin embargo tengo la misma ilusión que aquella primera vez, un lejano día de diciembre.
Esta vez te recogeré en la estación, quieres buscarte un hotel cerca del mar, siempre nos gusto encontrarnos cerca del mar, tenemos un paseo pendiente…
Recuerdo la primera cita, en un tren, el beso al despedirnos y el final de la tregua que nos habíamos marcado aquel primer día.
También recuerdo con dulzura nuestros encuentros.
Hoy me has recordado aquella primera noche en la que tuve que salir desnuda desde el baño hasta la penumbra de la habitación donde me esperabas sentado en un sillón.
Como me examinaste para después, mientras me tumbaba sobre tu regazo azotarme el trasero.
Me sentía extraña en aquella nueva situación para mí, mientras me hacías aflorar todas aquellas sensaciones mezcladas de vergüenza y deseo.
Te gustaba atarme, vendabas mis ojos con pañuelos de seda.
Jugábamos en cualquier parte, llegaste a atarme en una mesa de la habitación del hotel en una ocasión.
Cinco años ya…Y aún recuerdo tu olor y tu sonrisa.
Este año pasado coincidimos en varias fiestas, pero no me atreví a saludarte y aunque una vez cruzamos nuestras miradas no me reconociste.
Ahora mi melena es lisa y rubia, tú me conociste pelirroja, con el pelo corto, algo ondulado, y entonces estaba más delgada.
Me he acordado de ti estos días y hoy te he enviado un mail.
Hemos hablado de nuevo hace unos momentos.
Estuviste mirando unas viejas fotos mías hace unos días, casualidad que también hayas pensado en mí ahora, ambos nos hemos sorprendido de habernos pensado…Justo ahora.Tú creías que me había apartado de esto y que había vuelto con mi ex marido, te has sorprendido gratamente de que siga aquí. Has roto una relación hace un mes de tres años, desgastada ya por multiples peleas. Paralela tu trayectoria a la mía.
Estamos libres los dos, ambos sabemos lo que deseamos vivir, la experiencia de estos años queremos compartirla y quizás volver a probar juntos a ser Amo y sumisa.
Parece que este es nuestro momento y lo que entonces no pudo ser, quizás ahora vuelva sea posible.
Te he notado feliz de reencontrarme, tu voz delataba tu alegría, me has contado que últimamente te sentías desangelado y que no podías creer que yo hubiese vuelto a aparecer. Que buscaste mi teléfono pero yo lo cambié hace años, también cambié aquel mail al que me escribías, menos mal que tú conservaste el mismo…
Y me has afirmado que vendrás este fin de semana si deseo verte. Siempre me gusto tu impulsividad y tu sinceridad. Me has preguntado si estaría dispuesta a ir conociéndonos poco a poco, sin agobiarnos y probar.
Me has contado que estas terminando una novela, quieres que de nuevo sea tu primera lectora, te he contado que yo ahora también escribo y quieres leer mis cosas.
Llegarás el viernes…Han pasado cinco años y sin embargo tengo la misma ilusión que aquella primera vez, un lejano día de diciembre.
Esta vez te recogeré en la estación, quieres buscarte un hotel cerca del mar, siempre nos gusto encontrarnos cerca del mar, tenemos un paseo pendiente…
viernes, septiembre 15, 2006
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