jueves, febrero 23, 2006

Cesiones

Y vuelves una y otra vez...Vuelves a mi mente cuando creo que ya te he olvidado.
El frío suelo bajo mis manos, apoyo mi mejilla y cierro los ojos...
Arrodillada, ofrecida, siento como invade mis entrañas y te pienso.
Mi límite era la cesión ¿recuerdas? Pensé que jamás traspasarías ese, mi límite.
Y siento que ahora se esta cumpliendo tu voluntad.
Eres tú quien esta cediendo mi cuerpo, porque otro me disfruta, y sigo siendo tuya...
Y eres tú quien me abandona en otros brazos, eres tú quien no me reclama a su lado...
Y vuelves una y otra vez...Vuelves a mi mente cuando creo que ya te he olvidado.
El frío suelo bajo mis manos, apoyo mi mejilla y cierro los ojos...
Arrodillada, ofrecida, siento sus embistes y te pienso.
Sé que te pertenezco, en contra de toda lógica, te pertenezco, quizás porque me arrebataste un trozo de alma.
Y me siento excitada y deseosa para tí, mientras él ahonda en mi, porque te imagino susurrándome al oído, presenciando esta escena, y disfrutando de mi entrega...
El frío suelo bajo mis manos, ladeo mi cabeza y abro mis ojos.
Me entristezco. No me sirve imaginarte. No estás.

Sensaciones

Y vuelves una y otra vez...Vuelves a mi mente cuando creo que ya te he olvidado.
El frío suelo bajo mis manos, apoyo mi mejilla y cierro los ojos...
Arrodillada, ofrecida, siento sus embistes y te pienso.
Mi límite era la cesión ¿recuerdas? Pensé que jamás traspasaría ese límite.
Pero pienso que en este momento se esta cumpliendo tu voluntad.
Y ahora tu eres quien esta cediendo mi cuerpo, porque otro me disfruta, y sigo siendo tuya...
Y eres tú quien me abandona en otros brazos, eres tú quien no me reclama a su lado...
Y vuelves una y otra vez...Vuelves a mi mente cuando creo que ya te he olvidado.
El frío suelo bajo mis manos, apoyo mi mejilla y cierro los ojos...
Arrodillada, ofrecida, siento sus embistes y te pienso.
Sé que te pertenezco, en contra de toda lógica, te pertenezco,quizás porque atrapaste mi alma...
Y me siento excitada y deseosa para tí, mientras él ahonda en mis entrañas, porque te imagino susurrándome al oído, presenciando esta escena, y disfrutando de mi entrega...
El frío suelo bajo mis manos, ladeo mi cabeza. Y me entristezco.No me sirve imaginarte. No estas.